El lugar de trabajo como fuente de atracción de talento.
El lugar de trabajo o workplace, puede entenderse como el espacio dedicado al desempeño de alguna actividad dentro de un negocio, pero el término va más allá y abarca también las herramientas y recursos necesarios, las personas, sus conexiones y el uso que dan a los recursos.
Uno de los puntos que quizás, hoy en día, hay que tener más en cuenta, es el entorno de constante cambio en el que se encuentran las empresas, hay que estar muy al tanto de las nuevas tendencias digitales y cómo van cobrando más y más fuerza dentro del workplace, llevando a las empresas a la digitalización del puesto de trabajo.
Los sistemas y herramientas tienden a ser cada vez más colaborativos. La globalización, la deslocalización de los centros de decisión y producción, y la innovación abierta que implica el trabajo en equipo de empresas de distinto perfil y localización, hace que los trabajadores de distintos ámbitos demanden herramientas para colaborar de forma efectiva, independientemente del lugar en el que se encuentren.
Pero no sólo se buscan facilidades en la colaboración digital, se siguen valorando otros factores como el propio espacio de trabajo de la oficina o incluso espacios de descanso y relajación, como elementos con los que ofrecer una buena experiencia de trabajo
El desarrollo de un lugar de trabajo óptimo, por tanto, es un punto fundamental a la hora de captar nuevos talento y conservar el que ya se tiene, mejorando la marca como empleador de las empresas.
Marca de empleador como fuente de atracción de talento
Con el uso de nuevas tecnologías e Internet, en los departamentos de Recursos Humanos, se ha abierto todo un abanico de posibilidades para la captación de talento y está siendo una de las principales herramientas a la hora desarrollar la estrategia de “marca como empleador” o employer branding.
Disponer de una acreditación del tipo “Great Place to Work®”, dónde se recoge un listado con las mejores empresas para trabajar, acreditando y posicionando a las empresas como marcas de referencia a la hora de buscar trabajo, es un activo valorado por candidatos y responsables de recursos humanos
Y este es un aspecto importante en un momento en el que la «guerra» por el talento es un talón de Aquiles para muchas empresas que buscan innovar, desarrollarse y diversificarse. Según el estudio “Human Age 2.0: Las fuerzas futuras en el trabajo” de 2016, el 38% de los directivos mundiales encuentran grandes dificultades a la hora de encontrar candidatos que cumplan los requerimientos necesarios para determinados puestos clave, el porcentaje más alto en 7 años.
Si nos fijamos en España, un 33% de las empresas dice ser incapaz de atraer talento según el informe «Talent Trends 2017″. Ya no es suficiente un alto salario como principal atributo para atraer talento. La imagen de la empresa, un entorno de trabajo motivador, el atractivo del sector y la posibilidad de desarrollo profesional, son algunos de los atributos más buscados por los trabajadores.
Atraer y retener talento en la empresa no es el único motivo para desarrollar una buena estrategia de employer branding. Como consecuencia de un buen posicionamiento como empleador, se mejora la visibilidad de la compañía en el mercado, se reduce el coste por contratación al tener una menor rotación y la propia retención de talento provoca una mayor incentivación y competencia ‘positiva’ que repercute en la productividad del conjunto de la organización
Empleados satisfechos como fuente de beneficios
“Elige un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ningún día de tu vida” (Confucio, siglo VI a.c.)
La gestión del talento no sólo debe centrarse en conseguir atraer personas valiosas a la compañía, sino que deben cuidar a las que ya la integran y promover el compromiso y sentimiento de pertenencia entre sus equipos.
Promover un entorno de trabajo en el que gestionar adecuadamente el estrés diarios a la vez que se cuida el compromiso de las personas, repercute directamente en los indicadores de productividad. Según el estudio realizado por Hardvard Bussines acerca del estrés y el trabajo de 2017, entre el 60%y el 80% de los accidentes de trabajo se deben a índices altos de estrés entre los trabajadores, y por otro lado, los trabajadores desmotivados según el Instituto Gallup, cometen un 60% más de errores, tienen un 37% más de absentismo y sufren un 49% más de accidentes.
El lugar de trabajo como elemento diferenciador
Aunque la política de gestión de talento se compone de muchas y diversas líneas de actuación, fomentar la transformación del puesto de trabajo para que sea un facilitador de modelos de colaboración efectivos y dinámicos, se convierte en un elemento clave de la captación y retención de personas valiosas.
Algunas transformaciones que puede realizarse en el propio entorno de trabajo de la oficina; si una compañía está promoviendo una transformación de sus equipos de trabajo basada en implementar metodologías ágiles, el puesto de trabajo juega un papel clave: desde espacios abiertos que permitan la conectividad e interacción en y entre los equipos, hasta la posibilidad de teletrabajo que permite la movilidad del empleado o de colaboradores externos, con la digitalización del puesto de trabajo.
También el diseño de la oficina, la iluminación, el tipo de muebles o su disposición, son aspectos que inciden en la forma de trabajar de las personas y los equipos.
Y no sólo hablamos de espacios de trabajo. Otro de los aspectos fundamentales en referencia al workplace, son los espacios de descanso, con el fin de que sean también espacios de comunicación y acercamiento entre las personas: un futbolín, una mesa de juegos o una simple cafetera, hacen que estas áreas también ayuden a generar una experiencia satisfactoria en el hecho de “ir a trabajar”.
Desde GMAOffice promovemos soluciones y servicios que transforman el puesto de trabajo, digitalizándolo, fomentando la movilidad e interconectando personas. En definitiva, buscar el mayor grado de satisfacción por parte de empleados y colaboradores. Porque si atraer talento no es fácil, tampoco retenerlo y un entorno de trabajo adecuado, ayuda a generar una experiencia positiva en el “hecho de ir a trabajar”.